LA MAGIA DEL MOMENTO

Ayer escuché un gran graznido mientras paseaba ensimismada por la orilla del río, y me vino a la mente un taller de varitas mágicas que realicé hace poco más de un año. Asistieron 7 magníficas mujeres para fabricar la herramienta que les ayudaría a traer magia a sus vidas.Recuerdo que mientras ellas estaban enfrascadas en la tarea, yo percibía la alegría,el amor y la ilusión con la que las elaboraban. 
Al acabar, cada varita llevaba el sello peculiar y particular de cada una de ellas, pero de todas emanaba fuerza, sabiduría y poder interior.
Un par de días antes, había ido yo a recoger las ramas que después ellas transformarían convirtiéndolas en su vara de poder.
No sabía que me depararía ese día, cada vez que salgo al bosque ofrendo a Gaia por los regalos que me otorga, y yo sé que ella agradecida me deleita con un nuevo acontecimiento.
Así que me puse manos a la obra, pedí a las hadas que me indicaran hacia donde dirigirme y de seguida me vino a la mente una gran encina a la que yo venero enormemente, así que me dirigí hacia allí, y la verdad es que era el lugar indicado, justo al lado de ella se elevaban majestuosos un par de pinos, y no muchos metros mas allá un trozo de tierra con una decena de almendros totalmente floridos mitad blancos y mitad rosados. 
Mientras recogía las ramas del suelo de éstos magníficos seres escuché unos graznidos inconfundibles, miré hacia el cielo, y allí estaban, un par de cuervos, impregnándome de su magia, para yo poder inyectarla en las generosas ramas que cargaba en mis brazos. No me lo podía creer, habían aparecido, yo sabía perfectamente que era el tótem de la MAGIA, y realmente los esperaba, imaginaros que regalazo, que un par de cuervos me acompañaran precisamente el día que recolectaba material para un taller de varitas mágicas. Estos son los milagros que ocurren día a día si estamos despiertos y abiertos a recibirlos.
Antes de irme dejé en un hueco de la encina un puñado de cacahuetes, a las ardillas les encantan y dí las gracias a los árboles por otorgarme parte de su fuerza en aquellas ramas que aunque ya caídas seguían manteniendo su esencia.olvidaré ese día.
De camino a casa recordaba el gran mensaje que nos ofrecen los cuervos: " BUSCA AL MAGO EN TU INTERIOR Y TRANSFORMA TU VIDA" " TIENES EL DERECHO DE VER, Y VAS A EXPERIMENTAR LA MAGIA DE LA VIDA". 
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